foto tomada de wikipedia
“No
paséis el tiempo soñando con el pasado y con el porvenir; estad listos para
vivir el momento presente”. Mahoma (570-632): Es el profeta fundador del islam. De acuerdo a la
religión musulmana, Mahoma es considerado «el sello de los profetas» por ser el
último de una larga cadena de mensajeros, enviados por Dios para actualizar su
mensaje, que según el islam, sería en esencia el mismo que habrían transmitido
sus predecesores, entre los que se contarían Abraham, Moisés y Jesús.
Cada persona en este plano,
en el aquí y ahora tiene una porción de estadía, unos están más tiempo y otros
menos, es un hecho, eso lo podemos presenciar, podemos ser testigo del
transcurrir de esos días en que las personas que tenemos a nuestro alrededor están
en este plano, lo que es mas complicado atestiguar es si viven en el aquí y
ahora, cada día que pasa más personas entran en una cámara del tiempo y se
transportan al pasado “viviendo” de recuerdos, ya sea de momentos tristes o
alegres, personas que conocieron, glorias personales, añorando otros tiempos y
recuerdos de un pasado que jamás volverá, llenos de temor por lo vivido, temor
por todo aquello que intentaron y no salió como se tenía planeado, dejando de
tomar riesgos y con miedo a avanzar porque lo que les pasó los paraliza, alejándose
del hoy y tomando distancia de lo que verdaderamente importa, vivir la vida que
sueñas.
No tomamos en consideración que
cada momento es diferente a otro, cada experiencia, cada persona que conoces es
diferente a la otra, que lo que está por venir es siempre mejor que lo que
quedo atrás, que con cada paso viene una nueva oportunidad de cambiar lo que has
hecho y conseguir nuevos resultados, el pasado nos conecta con una nueva experiencia
que nos dice que seguro existe una forma diferente de hacer las cosas, lo único
que nos toca es darnos cuenta si estamos “viviendo” en el pasado o por el
contrario estamos viviendo el hoy y solo utilizamos el pasado como lo que es,
un maestro que nos enseño una forma de actuar, pero de ninguna manera permitir
que lo que paso nos paralice y dejar de asumir
nuestra próxima tarea, nuestro próximo reto.
Por otro lado están los que "viven" en el futuro, con mil preocupaciones por lo complicado, por lo negro que
se ve el futuro, lo que va a pasar, lo que puede pasar, "viviendo" en una burbuja
del tiempo en el futuro, mejor no hagamos esto por lo que pueda pasar en el
futuro, esperemos a ver que nos depara el futuro, roguemos a cual o tal Santo o
deidad porque el futuro sea mejor, dejando que lo que aún no ha pasado -- y en
el 80% de los casos no pasará-- nos paralice de hacer las cosas que en el hoy tenemos
que hacer, para que ese futuro traiga lo que nos merezcamos. De esta forma
convertimos el futuro en un agente de procrastinación, dejar lo que se tiene
que hacer hoy para otra ocasión, esperando que el devenir del futuro cambie las
condiciones haciéndolas más fáciles o mucho mejores para la tarea, la expresión
“mejor luego” se hace común y un paisaje lleno de cosas por hacer saltan a la
vista, el tiempo sigue su marcha y nos vemos en el futuro parados en el mismo
lugar víctimas de nuestra falta de decisión.
El futuro es impredecible e
indomable, podemos con trabajo y el accionar de cada día tomar las decisiones
que de alguna forma nos coloquen lo más cerca posible de alcanzar nuestras metas,
utilizando lo que nos pasó como referencia para tomar decisiones más acertadas
y el futuro como faro para que las decisiones que tomemos estén alineadas con
lo que queremos conseguir, esta fórmula asegura que no exista nada de nuestro
pasado que nos haga peso y que lo que podamos esperar del futuro, no nos
detenga a tomar ninguna decisión en el ahora, dejándonos ambas manos libres
para construir, tomar decisiones y crecer en el presente.
Porque en todos estos
momentos la pregunta que nos podríamos hacer es: ¿Qué es lo peor que puede
pasar? Si el pasado te indica que posiblemente te equivoques en la siguiente decisión,
te preguntas ¿Qué es lo peor que puede pasar? Si la respuesta no es que morirás,
entonces tómala no es tan grave, si la próxima decisión a tomar puede cambiar
lo que pase en el futuro y esto te inquieta pregúntate ¿Qué es lo peor que
puede pasar? Si la respuesta no es que alguien puede morir, entonces hazlo que
no es tan grave, vinimos a este mundo con un propósito, descúbrelo, trabaja en
consecuencia y no permitas que los fantasmas del pasado ni los espectros del
futuro te alejen de lo que realmente quieres conseguir en el aquí y el ahora.
Saludos y éxitos...
@by R. Reverón
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